Sí, sí! Habéis leído bien... una TORTILLA DE PATATA riquísisima!!!
¿Queréis ver cómo?
Fijaos cómo pelamos y cortamos las patatas y las cebollas...
Luego tuvimos que lavarlas bien.
Añadimos un poco de aceite y al microondas!
Mientras se cocinaban las patatas, fuimos batiendo los huevos con un poquito de sal.
Luego lo mezclamos todo, lo pusimos en un bol y al microondas de nuevo.
y... TACHÁN!!!!!!
Llegó lo mejor... ¡¡¡COMER!!!
Porque lo de fregar es menos divertido... jejeje!
Esperemos os guste y que desde casa nos ayudéis a repetir la experiencia!
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